Procedimientos para la conservación en el traslado de órganos.
En el traslado de órganos hay que seguir el procedimiento de conservación de un órgano, que comienza desde su extracción de la persona a la que se le quita, posteriormente se introduce en un recipiente con solución fría, unos 8 grados y se inspecciona detalladamente. Se mete en un recipiente estéril, dentro de una bolsa también estéril. Y por último se aloja dentro de un contenedor isotérmico, para transportarlo, rodeado de hielo. El transporte ha de ser rápido para que se pueda realizar el implante lo antes posible.
Hacer llegar un órgano de un donante a un receptor que se puede encontrar en otra localidad puede ser escabroso. En cualquier caso la donación de órganos para ser trasplantados supone un proceso de carácter urgente en muchos casos. El Servicio de Coordinación de la Organización Nacional de Trasplantes se encarga de optimizar el transporte de órganos y tejidos. Lo hace seleccionando el medio de transporte más rápido para el traslado de los mismos. Claro que ha de tenerse en cuenta tanto la distancia de los centros, como el tipo de órgano que se transporta.
Normalmente para distancias inferiores a 300 km se suelen usar las ambulancias como medio de transportes. Aunque a veces se usan coches de alquiler. Por tanto para estas distancias el medio de traslado elegido es el terrestre.
Para distancias superiores a 300 km, el traslado puede hacer en tren. El AVE, la alta velocidad permite el transporte de órganos de forma gratuita. Este sistema de traslado se ha usado para el traslado del riñón cruzado. Es así por el tiempo de isquemia que tiene este órgano. Que marca el tiempo que este órgano puede estar fuera del cuerpo, y que puede estar viajando. Se puede de esta forma programar más adecuadamente la intervención.
El hígado es otro órgano que tiene más tiempo de isquemia tras el riñón.
Para el caso del pulmón, su traslado es más difícil, con lo cual lo que se suele usar para su transporte son los medios aéreos. Normalmente se recurre a compañías aéreas como Iberia o Air Europa que han firmado acuerdos de gratuidad. En estos casos los órganos viajan en la cabina del piloto. En otros casos se usan avionetas privadas cuyo coste puede ser bastante elevado.
Los barcos al ser un transporte más lento no se suele usar para el traslado de órganos. Los helicópteros al no poder viajar de noche y en largos recorridos también son descartados.
